Stolidus
Aquellas personas incapaces de salir de su ignorancia o modificar un punto mediante el razonamiento de posiciones o conductas, imposibilitadas para comprender, como si fueran piedra.
En castellano es Estólido: el que no comprende. Lo prefiero a Stupidus (ser, estar o quedar paralizado), o Stultus (necio, bobo), para designar a ese tipo de persona:

Tu amigo el "erudito", que te repite una vez más que Scorsesse está increíblemente infravalorado, que probablemente no hayas oído hablar de su película favorita: Pulp Fiction, o que tiene un gusto demasiado peculiar, y que no puedes comprender el verdadero mensaje de "El Club de la Lucha".
La cuestión es que ya sabes de quién estoy hablando, lo conoces, el filmbro: La persona que se percibe a sí misma como un gran friki de las películas, pero que en realidad tiene un conocimiento relativamente superficial de las mismas; y que, en definitiva, mira por encima del hombro a aquel con el que conversa.
"inamovible, que no cambia de opinión"
Ese, ese mismo, sé que tienes su imagen en la cabeza. El que espera una cara de sorpresa cuando te comenta la última película que ha visto . Porque claro, él tiene un gusto único y exquisito que tú no puedes comprender de lo frito que tienes el cerebro de ver películas de los Vengadores.
Nadie está negando que Blade Runner sea un peliculón. Los directores de los que hablan son aclamados por la crítica, la academia, y viven de ello. Pero es cómo pronuncian Scorsese, Fincher (siempre El Club de la Lucha y nunca Perdida, por cierto) y Tarantino, como si hablaran en un idioma antiguo que aprendieron por ciencia infusa, lo que hace ver su inconsciencia.
El encierro (voluntario o no) en su atmósfera egocéntrica los hace conformar su mural de presentación conforme a lo que creen que les hará parecer más cultos. Pero lo cierto es que sólo muestra sus intereses pretenciosos y su falta de conexión con el mundo real, en el que ver "objetivamente mejores" películas sólo implica que te has sentado frente a la pantalla y has podido buscar el mensaje con el teléfono.
En una mirada ciega con aire superficial, dibujan sus gustos como pretenciosos accesorios, incapaces de conformar sus intereses y pasiones como mero disfrute personal. Por desgracia, tu amigo el "erudito", es un filmbro que puede que ni disfrute viendo su película favorita.
