Mikie Sherrill y Abigail Spanberger, las mujeres que logran la victoria en EEUU.

Irene García Hernández. @_.ireneegarciia_

Mikie Sherrill (izquierda) y Abigail Spanberger (derecha) posan para un retrato conjunto en Washington D.C el 18 de diciembre de 2024 (Maansi Srivastava)

Las elecciones para las alcaldías de Nueva York, Nueva Jersey y Virginia han sorprendido al mundo entero: los demócratas vencen a los republicanos, dominando las tres ciudades. Zohran Mamdani se consolida como alcalde del territorio neoyorquino, mientras que sus compañeras de partido, Mikie Sherrill y Abigail Spanberger, no se quedan atrás.

Mikie Sherrill nació en Virginia en 1972, y 53 años después se sitúa como gobernadora de Nueva Jersey con el 56,2 % de los votos frente a la oposición, Jack Ciattarelli (republicano). Ha conseguido el apoyo de más de 1,6 millones de votantes gracias a una campaña en la que mostró de forma abierta su oposición a Trump y a su agenda.

Entre sus reformas principales se encuentra aumentar la tasa de capitalización de las pensiones, ampliar los derechos de negociación colectiva de los trabajadores y expandir los programas de capacitación laboral. Estas propuestas se alinean con las de Mamdani, demostrando que uno de los focos más importantes del Partido Demócrata es la clase trabajadora.

Por su parte, Abigail Spanberger se convierte en la primera presidenta mujer del estado de Virginia, derrotando a la vicegobernadora republicana Winsome Earle-Sears con el 57,5 % de los votos. Salió de su evento entre vítores de sus seguidores después de que CNN publicara los resultados:

"Esta noche enviamos un mensaje a cada rincón de la mancomunidad, un mensaje a nuestros vecinos y compatriotas estadounidenses en todo el país. Enviamos un mensaje al mundo entero de que, en 2025, Virginia eligió el pragmatismo por encima del partidismo."

Abigail enfocó su campaña en la unión de la población y en fortalecer la seguridad del estado, consiguiendo el respaldo de la Asociación Benéfica de la Policía de Virginia, que también había mostrado apoyo al bando republicano para los puestos de vicegobernador y fiscal general. Asimismo, lucha por el acceso al aborto y el matrimonio entre personas del mismo sexo, oponiéndose a las ideas de Earle-Sears.

Ambas victorias demuestran al mundo dos cosas clave. La primera, que las mujeres estadounidenses están luchando (y venciendo) por hacerse un lugar en el gobierno de su país. Y la segunda, como dijo el miércoles Ken Martin, presidente del Comité Nacional Demócrata:

"No tengan dudas: el Partido Demócrata está de vuelta."