Guía para ir absurdamente a la moda este invierno 2025

27.11.2025

El invierno 2025 llega con nuevas reglas: reinventar tu armario nunca fue tan urgente

Laura Vázquez Maceiras 

Ha llegado el frío otra vez. Y no, eso no solo significa que tengas que guardar tus pantalones cortos y tops porque el clima ya no acompaña, sino que probablemente los vas a tener que tirar (O intentar vender en Vinted). Nuevas tendencias se avecinan y no vas a ser tú quien se quede fuera. Olvídate de la ropa del año pasado, ahora manda lo que todavía no tienes en tu armario.

Este invierno, lo in son los vaqueros con tachuelas, los clips de pelo con flores de tela al más puro estilo de la Feria de Sevilla (a ver si conseguimos gentrificar la fiesta un poco más), y las diademas que te transforman automáticamente en la Blair Waldorf de tu facultad. Ah, y no olvidemos las uñas postizas de 30 euros con temática donut-glaze-french-tips-glass-skin-clean-girl-aesthetic, o cualquier otro término inventado por Hailey Bieber esa semana.

Para lucir hay que sufrir, y tu cartera lo va a saber bien. Toda tu ropa del año pasado ya no sirve si quieres pasear por Malasaña y sentir que eres la más única. Tus Adidas Samba tienen los días contados, así que reemplázalas por unas Puma rosas. Tus botas cowboy, esas que juraste que eran para toda la vida, ahora deben dar paso a unas botas biker porque "es lo que se lleva".

Y sí, tu falda satinada del Zara del año pasado y la falda de globo que compraste para aquel festival indie también han pasado a la lista de reliquias de museo. Este invierno manda el ante, en todo tipo de prendas, pero sobre todo en faldas y chaquetas. Así que también dile adiós a tu abrigo de pelo del invierno pasado con el que vivías tu sueño Carrie Bradshaw. Todavía puede asomar, pero solo si quieres sentirte como una versión vintage de ti misma mientras todos los demás desfilan con ante de pies a cabeza. Tú verás…

Y olvídate del estampado de leopardo, este año mandan los polka dots (lunares de toda la vida, si me preguntan). Los cinturones grandes con tachuelas que te hicieron sentir Coachella-ready tampoco se llevan. Ahora el toque chic se consigue atando un pañuelo de colores meticulosamente al pantalón… o al cuello, para las más atrevidas.

¿Te han subido las dioptrías por tanto uso de pantallas? ¡Perfecto! Ahora puedes lucir unas gafas con montura ovalada al más puro estilo Kendall Jenner. ¿No estarías pensando en comprarte un modelo básico de Ray-Ban, verdad? 

En España, las chicas cayetanas lo tienen un poquito más fácil. Sus Longchamps, manoletinas, blusas con volantes de Renatta, bufanditas y Zadigs ya son un clásico. Ellas no sufren tanto, su moda ya tiene una ruta previsible y elegante, mientras que el resto de mortales corre detrás de tendencias fugaces que desaparecen antes de que se cierre Instagram.

Apúrate antes de que Emma Chamberlain salga a la calle, los paparazzis hagan su magia y Shein robe los diseños de pequeños creadores para ponerlos a la venta en cuestión de horas y descubras que, otra vez, el invierno te ha dejado fuera de moda. Bienvenida al ciclo infinito de la moda rápida, bonita, efímera… y brutalmente cara.